El entendido en la Palabra hallará el bien, y el que confía en Jehová es bienaventurado. (Proverbios, 16:20)
Recientemente alguien me dijo que a pesar de llevar bastante tiempo leyendo la Biblia, no llegaba a entenderla totalmente.
Al no haberle preguntado, no sé si se refería a tener un conocimiento intelectual de ella o entenderla, para llevarla a la práctica.
Lo que sí sé, es que, como le dijo el Señor Jesús a un intérprete de la ley, ya sea para una cosa o para otra, si ponemos en práctica todo aquello que hemos llegado a entender (por poco que sea) de La Palabra de Dios, ganaremos mucho:
Y he aquí un intérprete de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna? Él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo lees? Aquél, respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo. Y le dijo: Bien has respondido; haz esto, y vivirás. (Lucas, 10: 25-28)
Así que, para empezar, no se necesita más. Así de simple.
¿Podrías pensar en ello?